Adiós al CBU: simplifican claves para operar por bancos
Podrá reemplazarse desde diciembre por un alias alfanumérico
Andar contando dígitos hasta llegar a los 22 será parte del pasado en
breve. El
Banco Central (BCRA) aprobó esta semana una norma que (Comunicación A 6044)
que permitirá cambiar la Clave Bancaria Uniforme (CBU), el fatigoso código de 22
números que se debe usar hoy para realizar cualquier transferencia, por códigos
alfanuméricos más simples, al menos, de recordar.
La nueva modalidad para identificar las cuentas bancarias podrá usarse para
validar los movimientos desde diciembre, dando lugar a que el usuario valide
claves que se le sean mucho más familiares, aunque tratando de mantener un
estándar de seguridad. Así números como 6757000045679812340980 podrán ser
reemplazados por combinaciones como “CharlyMarx2005”, “CristinaGuti94”,
“Estudiantes110” o hasta “Carnicero44671”, sólo por citar algunos ejemplos.
La modalidad para identificar cuentas podrá ser una especie de “alias” que,
como condición excluyente, deberá estar compuesto por una combinación de 14
caracteres (letras o números). Esta nueva opción coexistirá con el CBU, número
que contiene códigos que identifican al banco, la sucursal de origen de las
cuentas y el titular de la misma.
La norma del BCRA publicada esta semana establece que las entidades
financieras deberán “adecuar sus funcionalidades de Internet, banca móvil y
plataforma de pagos móviles para permitir crear, mantener y usar un alias
unívoco con el CBU correspondiente a cada cuenta”.
Y que “los titulares de las cuentas podrán informar esos alias en reemplazo
del número de CBU para recibir pagos y transferencias”. Dicho alias será
administrado por la cámara electrónica de medios de pago de bajo valor (Coelsa),
pero podrá ser gestionado y obtenido a través de homebanking.
La medida apunta a agilizar el sistema de pagos electrónicos además de la
movilidad. Ocurre que la norma contempla que cuando un cliente cambie de banco,
podrá usar exactamente el mismo usuario que tenía para asociarlo a su nueva
cuenta bancaria, de manera que todos aquellos con que opera habitualmente no
deban modificar (a su vez) ningún dato para seguirle cursando movimientos
normalmente.